Las flores contribuyen a dotar de alegría a cualquier espacio
y a hacer de una casa, un hogar, pero somos legión los que tememos por la vida de las pobres plantas que llegan a nuestras manos. Saber cuándo regarlas para que luzcan bien bonitas parece algo muy sencillo para muchos, pero para otros es una continúa carrera de obstáculos (como olvidos o viajes).
Solucionarlo es muy fácil: una planta artificial. No tan bonita como la natural, quizás, pero mucho más resistente. En Ikea tienen 3 novedades bastante chulas en cuanto a plantas artificiales en maceta. ¿Quieres verlas?
Son de la serie Fejka y cada una cuesta 4’99 euros, salvo las últimas, que cuestan 5’99 euros.


¿Qué te parecen?


