La novedosa concepción de la decoración que promueve Ikea, no se olvida del arte. En cualquiera de sus tiendas podrás encontrar una amplia variedad de cuadros como esta réplica de una obra de Gustav Klimt. Pero además el sentido práctico de la firma sueca, hace que no vean el arte como un simple objeto de decoración, y te proponen múltiples usos para sus pinturas.
Un cuadro puede ser un simple objeto de decoración, colgado en tu pared. O puede ser algo más.
Si te decantas por un cuadro de grandes dimensiones, puedes utilizarlo para dividir espacios y crear una zona más íntima o privada en la habitación que prefieras. O puedes transformar tu cuadro en un precioso cabecero para tu dormitorio.
Si tienes una habitación en la que no hay ventanas, Ikea te propone «engañar» a los sentidos con una serie de cuadros con imágenes de la naturaleza, que harán que te olvides de que se trata de un lugar cerrado.
El límite está en tu imaginación. Ikea propone y tu le das estilo personal a tu hogar.